domingo, 3 de abril de 2011

CONTAMINACIÓN SOCIAL EN HUELVA.
El concepto de contaminación social nace en la IV Conferencia Internacional de Salud Pública celebrada en Toronto (Canadá) en la que participó la Mesa de la Ria exponiendo la situación medioambiental y social de Huelva como resultado de la implantación de las industrias químicas en los años 60.
El nacimiento de la contaminación social en Huelva tiene lugar con la creación del estado de las autonomías que, con la cual, la Junta de Andalucía adquirirá competencias en cuestiones como el Medio Ambiente, el control de las costas y algunas otras que favorecerrán las relaciones entre la administración autonómica y las industrias químicas contaminantes.
La voz del pueblo será acallada por el matrimonio PSOE - Industrias Químicas quienes se encargarán desde el poder de controlar todos los aspectos de la vida en Huelva, con el objetivo de mejorar la imagen de las industrias químicas, y contrarestar todas las opiniones contrarias al poder químico. La maquinaria de contaminación social se ha puesto en marcha. Ha nacido la "Mafia Química" en Huelva.
El poder de estas empresas en la vida social de la cuidad es ilimitado. Controlan a los medios de comunicación, están dentro de la universidad influyendo para que los estudios que allí se realizan no expongan conclusiones que puedan perjudicarlos, presionan sobre asociaciones de ciudadanos o de empresarios para que su procedimiento los beneficien.
En el caso de la prensa local, el control se ejerce a traves de la adquisición de acciones de estos medios de comunicación privados, o bien a través de la publicidad que supone las 2/3 de los ingresos de los periódicos, radios y televisiones locales. Destacar noticias en las que se valora la falsa riqueza que estas industrias generan para Huelva y ocultar o maquillar aquellas noticias que puedan ser negativas para ellas, esta es la práctica habitual en la prensa onubense.
El control por la patronal química de los medios de comunicación, que utilizan los políticos, es otro de los pilares que sustentan la Contaminación Social en Huelva.


INCUMPLIMIENTOS LEGALES DE LAS INDUSTRIAS QUÍMICAS Y BÁSICAS

Estas empresas que se instalaron en Huelva a partir de los años sesenta, han sido muy influyentes en la vida social y política de la ciudad, incluso han contado con el apoyo incondicional, tanto del régimen anterior como del actual, en democracia.
Sus propietarios han ocupado altos cargos en la administración española, como el Sr. Villar Mir dueño de Fertiberia, ministro de Franco o Henri Kissinger mayor accionista de Freeport Macmoran, grupo al que pertenece Atlantic Cooper, otra de las industrias de la Punta del Sebo.
Estas circunstancias son las que dan lugar a que estas empresas incumplan a lo largo de los años las distintas leyes a las que están obligadas con el consentimiento, en especial, de la Junta de Andalucía, que indujo con su permiso a que las balsas de fosfoyesos llegasen a 30m de altura, cuando la licencia le permitía sólo 3m. Este incumplimiento, junto con otros, que incluía la concesión que el Ministerio de Medio Ambiente había firmado con Fertiberia es lo que ha dado lugar a que la sentencia de la Audiencia Nacional haya ordenado el final del vertido de fosfoyesos a la marisma. Estos residuos han sido catalogados como contaminantes por sus altos contenidos en Uranio con emanaciones de gas Radón, lo que han negado insistentemente la empresa y la Consejería de Medio Ambiente, llegando a permitir ésta, la utilización de este residuo en cultivos agrícolas en la provincia de Sevilla. Fertiberia ha sido sancionada en varias ocasiones por delitos medioambientales.
La empresa Atlantic Cooper tiene una sentencia condenatoria de la Audiencia Provincial de Huelva por un delito continuado contra el medio ambiente, ya que vertía residuos tóxicos en la cuenca minera y los trasladaba en camiones sin control por las carreteras de la provincia. Esta empresa se ahorró por esta práctica 10 mil millones de pesetas, la multa que le pusieron fue de 5 millones de pesetas y un año de cárcel al director: D. Patricio Barrios, pena que no cumplió por no tener antecedentes. Esta empresa continuó estas prácticas ilegales durante un año mas después de la sentencia con el consentimiento de la Consejería de Medio Ambiente.
Hay continuas emisiones a la atmósfera de gases contaminantes, muy perjudiciales para la salud que se han dado durante muchos años, sin que ninguna administración, especialmente la andaluza haya intervenido en la mayoría de los casos. El arsénico, sustancia altamente tóxica, emitido sobre todo por Atlantic Cooper inunda nuestro entorno ya que a lo largo del año se dan emisiones de hasta 96 nanogramos por metro cúbico (el máximo permitido es 6 ngr/m3).

En la marisma de Huelva, en los terrenos concedidos a Fertiberia para verter fosfoyesos, se han tirado con el consentimiento de ésta y de la Junta de Andalucía otros residuos tóxicos sin licencia. Tanto la marisma del Tinto como la del Odiel son espacios de alto valor biológico, catalogados como Reserva de la Biosfera por la UNESCO, las administraciones han consentido la máxima degradación en la del Tinto al permitir los vertidos de millones de toneladas (fosfoyesos 120) sin considerar todas las normativas tanto españolas como europeas que prohibían esta actividad. Junto a los fosfoyesos se llegaron a tirar 5700 toneladas de cenizas radioactivas (Cesio 137) cuyas emisiones están pasando continuamente a la atmósfera y a las aguas del río.
Las aguas ácidas de las balsas de fosfoyesos se vierten de manera continua al río Tinto, incluso se dan casos de grandes vertidos como el accidente del 31 de diciembre de 1998 debido a un fuerte temporal. Ninguna de estas empresas es sancionada ante tamaños delitos y, si lo son, no los cumplen, ya que ninguna administración se lo exige.


EL ENGAÑO DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA RESPECTO A LA SALUD
El nivel de contaminación que sufre la ciudad de Huelva y su entorno, como ha quedado demostrado, tiene una repercusión directa en el medio ambiente y en la salud de las personas.

La Consejería de Salud de la Junta de Andalucía y su Delegación en Huelva, siempre defendieron que el alto índice de cáncer en Huelva era debido a malos hábitos de vida y alto porcentaje de consumo de tabaco por encima de la media andaluza.
Pero lo cierto es que estas, mintieron, ya que, la propia Junta de Andalucía, en su Plan Integral del Tabaquismo, coloca a Huelva por debajo de la media andaluza en el consumo de tabaco, siendo la cuarta provincia andaluza donde menos se fuma.
Además desde la propia administración andaluza, se han criticado estudios realizados por distintos científicos, especializados en la salud pública, como el Dr. Joan Benach de la universidad Pompeu Fabra, o el informe oficial del instituto de Salud Carlos III de Madrid.
El profesor Benach, en su "Atlas de Mortalidad en Áreas Pequeñas de España (1987- 1995)", expone que en el triángulo entre Huelva-Cádiz-Sevilla se produce una elevada incidencia de cáncer entre sus habitantes, lo que se ha denominado como el "Triángulo de la Muerte".
Coincide con este estudio realizado por el instituto de la Salud Carlos III, y editado por el Centro Nacional de Epidemiologia, que revela la existencia de un problema de salud pública en Huelva, ante el que las administraciones locales y estatales no pueden permanecer impasibles.
A pesar de estos estudios, aún no se ha realizado en Huelva un verdadero estudio Epidemiológico.


La información la he obtenido de la revista de la Mesa de la Ría llamada: La Contaminación Social en Huelva y de documentos aprotados Aurelio González un componente de la Mesa de la Ría.